jueves, 3 de octubre de 2013

Entre lineas - Volando sin ataduras..


Volar con el pie atado a un cordel no es volar.
Es igual que saltar sin soltar del cemento el zapato, como pulir diamantes con terciopelo e intención.
Es algo como gritar sin voz.

Volar de tu mano no es volar.
Es comprar el billete del tren al que no quiero subir, para ver tu sonrisa.
O compartir mi camino contigo y llevarte volando por consecuencia, en ambos casos, con el pie atado a un cordel.